Los clavicordios permiten abordar la mayor parte del repertorio de música compuesta para teclado de la época barroca y con el clavicordio no ligado se puede además interpretar el repertorio de principios del piano (como por ejémplo las primeras piezas de Beethoven).
El nivel sonoro es bajo (salvo para el ejecutante) y no permite acompañar otros instrumentos. Todo es suavidad y refinamiento.
Son excelentes instrumentos de trabajo y de mantenimiento fácil. El clavicordio ligado es el màs compacto de todos nuestros instrumentos.
Una funda con correa, propuesta en opción, permite el transporte al hombro.
